Ventajas y desventajas de ser padres mayores
Muchas parejas esperan la llegada de sus hijos a un momento personal y profesional estable. Por ello hoy en día es muy común convertirse en madre por primera vez a partir de los 35 años o 40 años.
La llegada de un bebé a edades avanzadas proporciona una inmensa felicidad a la pareja que puede cuidar y criar a su hijo de una forma más holgada y segura que años antes, puesto que durante los últimos años los padres han conseguido mayor estabilidad para formar una familia.
Ventajas de ser padres jóvenes
Las principales ventajas que existen al ser padres mayores se encuentran:
- Más estabilidad: las personas que deciden tener hijos a una edad avanzada lo hacen con una mayor estabilidad personal y profesional.
- Mayor economía: se cuenta con una mayor solvencia y recursos económicos que a edades más jóvenes.
- Llegada esperada: generalmente los bebés que nacen en parejas a partir de los 35 años o de los 40 años suelen ser muy esperados y queridos por sus padres.
Desventajas de ser padres mayores
Entre las principales desventajas de ser padres mayores se encuentran:
- Menor energía: las personas que se convierten en padres a partir de los 40 años suelen tener menos energía en la crianza diaria de sus hijos que si los hubieran tenido a edades más tempranas.
- Distancia generacional: en muchos casos los padres mayores no se relacionan de la misma forma con sus hijos ni llegan a entenderlos por la gran diferencia de edad que existe entre ellos.
- Mayores problemas de fertilidad: a partir de los 35 años las mujeres aumentan los problemas de fertilidad para poder quedarse embarazadas teniendo que utilizar diversos métodos o técnicas para conseguirlo.
- Mayor dificultad parto: tanto el parto como el posparto de una gestante de edad avanzada es más complicado y difícil que en aquellos casos de mujeres de menor edad.